Guisantes frescos con fideos konjac y huevo

Los guisantes frescos de temporada son una delicatessen. Es una lástima que duren tan poquito y el resto del año no puedan consumirse así. Ahora es su mejor época y los podemos encontrar en casi todas las tiendas de verduras y hortalizas.

 1 kg guisantes frescos en vaina (300g limpios)
 1 paquete de Fideos Konjac de Albahaca
 1 patata
 1 cebolla blanca
 2 huevos ecológicos
 3 cucharaditas de aceite de oliva virgen extra
 100 ml de vino blanco
 Sal
 Pimienta negra

1

Empezamos retirando los guisantes de las vainas. Su peso una vez limpio se corresponde a un 1/3 de lo que pesaban inicialmente con la vaina.

2

Cortamos la cebolla blanca en trocitos pequeños, ponemos en una cazuela dos cucharaditas de aceite de oliva virgen extra y sofreímos a fuego medio hasta que tome color doradito.

Mientras se va pochando la cebolla pelamos y cortamos a daditos pequeños la patata. Le ponemos una cucharadita de aceite de oliva virgen extra, una pizca de sal y las horneamos 20 minutos a 180ºC.

3

Añadimos los guisantes e inmediatamente incorporamos el vino blanco. Subimos el fuego y dejamos que evapore y reduzca durante 5-6 minutos. El guisante es fresco, y por lo tanto muy tierno, si lo hacemos más perderemos muchas propiedades y nutrientes. Añadimos la patata a los guisantes.

4

Preparamos los fideos de albahaca, para ello únicamente necesitamos abrir el paquete y calentarlos junto con los guisantes 1 minuto a fuego alto. Para que el plato sea más completo, preparamos un huevo a la plancha, y servimos en el centro del plato con un toque de sal y pimienta negra. Un mezcla perfecta, saludable y llena de nutrientes.