Un postre cremoso, lleno de vitaminas, con todo el sabor del mango y un poco de harina de konjac para un aporte extra de fibra...
Basta con pelar el mango, cortarlo a trocitos y mezclarlo junto con el resto de ingredientes en la batidora hasta obtener una mezcla homogénea. Repártelo en 2 vasitos, ponlo a enfriar a la nevera durante al menos 15 minutos y listo!